El presidente sirio, Bashar Al Asad mandó un mensaje a su homólogo ruso, Vladímir Putin, que incluía una invitación para que envíe la fuerza aérea rusa, "en el marco de la iniciativa del presidente Putin para combatir el terrorismo", precisó la oficina del mandatario.
En un comunicado se destaca que los lazos entre ambos países están gobernados por "la confianza, las leyes internacionales y los acuerdos logrados entre los estados para perseguir los intereses de sus pueblos y asegurar la paz y la unidad de sus territorios".
El Consejo de la Federación (Senado) de Rusia autorizó el uso de las fuerzas aéreas de este país en Siria, a petición de Putin, un permiso que no incluye una intervención terrestre.
El jefe del gabinete del Kremlin, Serguéi Ivanov, reveló que Al Asad se había dirigido a la dirección de su país para pedir ayuda militar.
Ivanov explicó que el objetivo de esta intervención militar será luchar contra la organización terrorista Estado Islámico (EI), que proclamó un califato en Siria e Irak a finales de junio de 2014, donde ha tomado partes del centro y el norte de ambos países.
Putin, uno de los principales aliados internacionales del régimen de Al Asad, defendió el lunes la creación de una coalición internacional para luchar contra los yihadistas junto al Gobierno de Damasco e Irán, durante su intervención en la Asamblea General de la ONU en Nueva York.
Sin embargo, tras su reunión ese mismo día con el presidente estadounidense, Barack Obama, descartó por completo una operación terrestre de las tropas rusas en Siria, aunque reconoció que Moscú sopesa bombardear las posiciones del Estado Islámico en el país árabe. , que incluía una invitación para que envíe la fuerza aérea rusa, "en el marco de la iniciativa del presidente Putin para combatir el terrorismo", precisó la oficina del mandatario.
En un comunicado se destaca que los lazos entre ambos países están gobernados por "la confianza, las leyes internacionales y los acuerdos logrados entre los estados para perseguir los intereses de sus pueblos y asegurar la paz y la unidad de sus territorios".
El Consejo de la Federación (Senado) de Rusia autorizó el uso de las fuerzas aéreas de este país en Siria, a petición de Putin, un permiso que no incluye una intervención terrestre.
El jefe del gabinete del Kremlin, Serguéi Ivanov, reveló hoy que Al Asad se había dirigido a la dirección de su país para pedir ayuda militar.
Ivanov explicó que el objetivo de esta intervención militar será luchar contra la organización terrorista Estado Islámico (EI), que proclamó un califato en Siria e Irak a finales de junio de 2014, donde ha tomado partes del centro y el norte de ambos países.
Putin, uno de los principales aliados internacionales del régimen de Al Asad, defendió el lunes la creación de una coalición internacional para luchar contra los yihadistas junto al Gobierno de Damasco e Irán, durante su intervención en la Asamblea General de la ONU en Nueva York.
Sin embargo, tras su reunión ese mismo día con el presidente estadounidense, Barack Obama, descartó por completo una operación terrestre de las tropas rusas en Siria, aunque reconoció que Moscú sopesa bombardear las posiciones del Estado Islámico en el país árabe.