La bebé, que consiguió sobrevivir al seísmo y nació bajo los escombros, ha sufrido varios intentos de secuestro en las últimas horas.
Así lo ha confirmado el el Observatorio Sirio de Derechos Humanos. En un comunicado la ONG ha explicado que "un grupo militar de la división Al-Sultan Murad irrumpió en el Hospital 'Cihan' en Afrín, a punta de pistola, y agredió e insultó al director del hospital y al personal médico, en un intento de secuestrar a Aya y entregarla a el régimen".
Al conocerse la historia en todo el mundo y tras la intención de varias organizaciones de adoptar a la niña ofreciendo "millones de dólares", Aya ha sufrido varios intentos de secuestro en las últimas 48 horas.
La agencia Associated Press ha relatado que varios hombres armados irrumpieron ayer en el hospital sirio que atiende a la niña para intentar secuestrarla.
La policía comenzó a custodiar a la niña después de que varias personas se presentaran en el hospital afirmando falsamente ser sus familiares, ha reconocido el médico que atiende a Aya.
Según ha relatado un funcionario del hospital a AP, al llegar al hospital los hombres armados dijeron a los policías que protegían a la niña que iban a por el director por haber despedido a su amigo y que no estaban interesados en Aya, pero al parecer no era así y la intención era secuestrar a la bebé.
La tía paterna de la niña se encargará de Aya
Aya podría abandonar el hospital el martes o el miércoles, según su tío abuelo, que afirmó que la tía paterna de la niña, que recientemente dio a luz y sobrevivió al terremoto, se encargará de criarla, ya que la familia de Aya no sobrevivió al terremoto.
Los equipos de rescate de la ciudad de Jinderis, en el norte de Siria, descubrieron a la niña de pelo oscuro más de 10 horas después del seísmo mientras excavaban entre los escombros del edificio de apartamentos de cinco plantas donde vivían sus padres.