Tanto David Cameron, primer ministro actual y candidato conservador, como Ed Miliband, líder del Partido Laborista, apuraron el miércoles por la noche las últimas horas de la campaña electoral para tratar de captar votos entre el electorado indeciso.
Según las encuestas, las dos formaciones mayoritarias están igualadas en intención de voto, ambas con cerca del 34% de apoyo, y no obtendrían una mayoría suficiente para gobernar en solitario.
Si los resultados cumplen con las predicciones de los sondeos, cuando los colegios cierren el jueves a las 22.00 hora local (21.00 GMT) se abrirá un complejo proceso de negociaciones para formar Gobierno.
El Partido Nacionalista Escocés (SNP) aspira a llevarse la mayoría de los 59 escaños reservados para la región en la Cámara de los Comunes y podría ser decisivo para otorgar la llave del número 10 de Downing Street, residencia y despacho oficial del primer ministro británico.
Los liberaldemócratas, actuales socios de Cameron en el Gobierno, verán reducidos sus escaños al pasar de 57 a 27 diputados, según los sondeos.
Por su parte, el eurófobo Partido por la Independencia del Reino Unido (UKIP) podría obtener el 13 % de los votos pero solo lograría unos 3 escaños debido al sistema electoral británico, que favorece a las formaciones mayoritarias.