Los senadores de LN mostraron carteles en los que se leía lemas como "Stop a la invasión" y llegaron incluso a abandonar sus escaños para alcanzar el centro del hemiciclo, donde forcejearon con algunos funcionarios que trataban de arrebatarles los folios. En medio de estos momentos de tensión la senadora y ministra de Educación, Valeria Fedeli, sufrió algunas contusiones en un brazo al ser empujada contra una mesa y tuvo que ser atendida en la enfermería, informan los medios locales.
Al mismo tiempo el secretario de la LN, Matteo Salvini, explicó en Facebook que "los senadores de la Liga están haciendo de todo, ocupando los bancos del Gobierno, provocando su expulsión y siendo maltratados por los ujieres, para bloquear esta loca ley". "Una loca ley querida por el Partido Demócrata (PD, en el Gobierno) en base a la cual por el mero hecho de haber nacido aquí automáticamente se convierte en ciudadano italiano. La ciudadanía se desea ¡Y se conquista! ¡No nos rendimos!", dijo Salvino, que empleó la etiqueta "la ciudadanía no se regala".
El proyecto de ley llegó al Parlamento en 2013, y fue aprobado por la Cámara de los Diputados (baja) en octubre de 2015 después de sufrir numerosos retrasos y recibir miles de enmiendas impuestas por los ultraderechistas de la LN. Prevé el reconocimiento de la nacionalidad a los hijos de extranjeros que hayan nacido en Italia, siempre y cuando al menos uno de los padres tenga permiso de residencia en la Unión Europea (UE) desde hace cinco años.
El debate del "ius soli" generará previsiblemente debate durante los próximo meses y, ante su tramitación en el Senado, el Movimiento Cinco Estrellas (M5S) ya han anunciado que se abstendrán porque solo provocará "derivas propagandísticas de la derecha y la izquierda". "Conceder la ciudadanía italiana implica conceder la ciudadanía europea, un tema tan delicado que debe ser precedido por una discusión y un concierto con los Estados de la Unión Europea, para tener reglas uniformes", señalan en un comunicado en el M5S.
En Italia la nacionalidad actualmente está basada en el "ius sanguinis", según lo cual una persona adquiere dicho estatus de sus padres italianos independientemente del lugar donde haya nacido, aunque sea en el extranjero. La nacionalidad para un extranjero nacido en el país se concede cuando este cumple los 18 años, demuestre que ha vivido en el "legalmente e ininterrumpidamente" y siempre y cuando declare su deseo de adquirirlo.
También puede adquirir la nacionalidad, entre otras formas, mediante matrimonio o por "naturalización", es decir, concedida por el Estado a quien haya residido en Italia desde al menos 10 años si no pertenece a la UE y cuatro años si es europeo.