202 millones de menores de 5 años, según Unicef, sufren pobreza alimentaria y cerca de 7.000 niños mueren cada día en el Planeta por causas relacionadas con la desnutrición. Un quinto de los niños (460 millones) vive en zonas de conflicto, 1.000 millones sufren las consecuencias del cambio climático -más de la mitad- y estamos ante una crisis del sistema humanitario sin precedentes como advierte José María Vera, director ejecutivo de Unicef. Hay millones de niños siguen atrapados en crisis humanitarias que son cada vez más grandes y complejas.
En su informe de Acción Humanitaria para la Infancia 2024, el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) hace una petición de emergencia para financiar con 9.300 millones de dólares el envío de ayuda humanitaria a más de 90 millones de niños en todo el mundo en 2024. La mayoría de los fondos – hasta 1.140 millones de dólares) se destinarán a los menores en Afganistán, donde se calcula que dos tercios de la población requiere ayuda humanitaria.
Además harán falta, tal y como advierte Unicef, otros 860 a millones de dólares para asistir a los refugiados sirios, 840 millones para los niños de Sudán, 804 millones para los menores de República Democrática del Congo y 580 millones adicionales para los niños refugiados de Ucrania.
