La pareja, formada por David y Louise Turpin, fue arrestada en enero después de que uno de sus trece hijos, que tenían entre dos y 29 años, lograra escapar de la casa y alertara a la Policía.
El fiscal del condado de Riverside Mike Hestrin presentó más de una veintena de cargos contra cada uno de ellos que incluyen detención ilegal, abuso a menores --también abuso sexual-- y tortura.
El representante del Ministerio Público ha relatado que los abusos comenzaron cuando el matrimonio vivía en Texas y continuaron cuando se mudó a California. Empezaron como un caso de "negligencia severa" y derivaron en claros casos de "tortura".
Dos de los hijos han comparecido durante la jornada ante el tribunal y han testificado acerca de los abusos sufridos. "Mis padres me arrebataron toda mi vida", ha dicho una de las hijas. "Ahora, la estoy recuperando. Soy una luchadora", ha agregado, según la cadena de televisión estadounidense CNN.
Por su parte, otro de los hijos ha dicho "no poder describir con palabras lo que sufrió". "A veces tengo pesadillas con cosas que pasaron, como cuando mis hermanos eran encadenados o recibían palizas", ha manifestado. "Eso es el pasado y ahora es el presente", ha indicado, antes de apuntar que "quiere a sus padres" y "les ha perdonado muchas de las cosas" que les hicieron a sus hijos.
Louise Turpin ha realizado declaraciones también durante la jornada y ha pedido disculpas a sus hijos. "Lamento todo lo que hice para causar daño a mis hijos", ha dicho la madre, que ha llorado durante la comparecencia. "Les quiero más de lo que pueden imaginarse", ha añadido.
David Turpin no ha podido hablar debido a las lágrimas, por lo que su abogado ha leído un comunicado en el que el hombre ha deseado éxito a sus hijos y les ha pedido que permanezcan unidos. "Doy gracias a Dios por todos mis hijos", ha dicho el padre en su comunicado, en el que ha señalado que lamenta "si ha hecho algo que les haya causado daño".