"No tengo conocimiento de la caída de ningún avión" que haya sido contratado o que estuviese al servicio de la Autoridad Nacional de Protección Civil (ANPC), dijo Vaz Pinto en rueda de prensa.
No obstante, reconoció que se enviaron equipos de búsqueda a la zona, en las proximidades de Ouzenda, en el término municipal de Pedrógão Grande, al tiempo que precisó que allí había una caravana abandonada con botellas de gas en su interior que pudo haber explotado y crear "confusión".
Vaz Pinto no supo explicar cómo llegó a propagarse esa información, que ha generado gran confusión en el centro de control de Avelar, desde el que se coordinan las tareas de extinción del fuego que arrasa el centro de Portugal desde el pasado sábado.
El comandante explicó que se ha "reajustado el plan estratégico de acción" para combatir las llamas, misión en la que trabajan más de 1.200 efectivos terrestres, apoyados por medios aéreos, algunos enviados de España, Italia, Francia y, desde este tarde, también Marruecos.
El balance de víctimas mortales se mantiene en 64, y los heridos son ya 160, de los que siete se encuentran en estado grave.
La situación esta tarde es especialmente preocupante en Góis, localidad situada a unos 40 kilómetros al norte de Pedrógão Grande, epicentro de la tragedia