"Nunca podremos aceptar la tolerancia de lo inaceptable. Compartimos la responsabilidad de proteger a las poblaciones de los delitos más atroces. La UE seguirán desempeñando una función en la lucha común contra las fuerzas del odio y la regresión de los valores de tolerancia y solidaridad junto con sus socios para trabajar por un orden global estable fundamentado en las leyes", ha afirmado Mogherini en un comunicado.
Mogherini ha destacado que este sábado se celebra el Día Internacional para la Reflexión sobre el Genocidio de 1994 contra los tutsis de Ruanda. "Nos sumamos a la conmemoración y rendimos tributo a los más de 800.000 hombres, mujeres y niños que perdieron la vida en atrocidades inhumanas deliberadas. Expresamos nuestra solidaridad a las familias y amigos cuya pérdida sigue vigente", ha apuntado.
La jefa de la diplomacia europea ha destacado que en estos 25 años el país se ha transformado "gracias a la determinación de su gente para reconstruir sus vidas y su país y lograr una reconciliación nacional". "El pueblo de Ruanda se merece un apoyo continuo en este camino y la solidar de la comunidad internacional", ha señalado.
"Los actos de homenaje de hoy suponen además una oportunidad de aprender de las lecciones del pasado en la zona y el mundo en su totalidad en un momento en el que es más importante que nunca defender valores universales, garantizar la rendición de cuentas y fomentar un multilateralismo efectivo", ha remachado Mogherini.
Más de 800.000 tutsis y hutus moderados murieron en los cien días transcurridos entre el 6 de abril de 1994, cuando el avión del presidente ruandés, Juvenal Habyarimana, fue derribado sobre Kigali sin dejar supervivientes, y el 4 de julio, cuando el Frente Patriótico Ruandés (FPR) tomó el control del país. Las víctimas esperan que se haga justicia y aún hoy hay al menos tres grandes criminales a la fuga.