Un hombre de 78 años ha sido condenado a tres años y tres meses de cárcel por abusar sexualmente de sus dos nietas, ambas menores de edad.
Las niñas se quedaban a cargo del abuelo cuando sus padres estaban de vacaciones, y era en ese momento cuando el agresor aprovechaba para agredirlas sexualmente. Abusó de las menores durante largos periodos de tiempo hasta que las niñas dieron el paso de confesárselo primero a sus primas, y después a su madre.
Una de las niñas ha declarado que cuando tenía 10 años, su abuelo le obligaba a tocarle los genitales y después él hacia lo mismo con ella. Su hermana recuerda que los abusos se produjeron cuando ella tenía entre 7 y 12 años.
Las niñas han explicado que no lo contaron antes por temor a las represalias, y, a pesar de que el hombre ha negado los hechos, la justicia australiana ha dado la razón a las menores.