El juez de distrito Ye Lwin ha indicado que "los acusados han vulnerado la Ley de Secretos Oficiales de 1923 y por ello deben ser condenados a siete años de cárcel". "El tiempo que han permanecido encarcelados desde el 12 de diciembre se tendrá en cuenta", ha fallado el juez.
Los dos periodistas, de 32 y 28 años, han denunciado que fueron detenidos después de que varios agentes de la Policía les ofrecieran una serie de documentos durante una cena a las afueras de Rangún, lo que han tildado como una "trampa" para encarcelarlos.
El director ejecutivo de Reuters, Stephen Adler, ha lamentado la decisión del juez y ha aseverado que se trata de "un paso atrás para la transición hacia la democracia de Birmania". En este sentido, ha instado a las autoridades birmanas "a corregir cuanto antes el error que se ha cometido" al condenar a los periodistas.
El Ministerio de Información había indicado previamente que ambos estaban detenidos por "adquirir información de forma ilegal con la intención de compartirla con la prensa extranjera".
Los periodistas de Reuters estaban en Birmania para cubrir la crisis de los rohingya. Más de 400 han muerto y más de 600.000 han huido a Bangladesh a causa de la operación militar puesta en marcha por el Gobierno contra esta minoría en represalia por un ataque perpetrado el pasado 25 de agosto por insurgentes rohingya contra las fuerzas de seguridad.