Continúan los ataques a los cascos azules en Líbano. Ha sido la Fuerza Interina de Naciones Unidas en Líbano (FINUL) la que ha denunciado este domingo que una excavadora israelí ha derribado una torre de observación en Marwahin, en el sur del país libanés, aunque por el momento se desconoce si hay daños personales.
"Una excavadora de las FDI (Fuerzas de Defensa de Israel) ha demolido deliberadamente una torre de observación y la valla perimetral de una posición de la ONU en Marwahin", ha explicado la propia FINUL en un comunicado publicado en Telegram.
La misión de la ONU recordado que "entrar en una posición de la ONU y provocar daños a bienes es una flagrante violación del Derecho Internacional y de la Resolución 1701 del Consejo de Seguridad", al tiempo que "pone en peligro la seguridad de nuestras fuerzas de mantenimiento de la paz en contra del Derecho Internacional Humanitario".
Ante esta situación, la FINUL recuerda "a todos los actores" su obligación de garantizar la seguridad del personal y propiedades de la ONU y "respetar la inviolabilidad de las instalaciones de la ONU en todo momento".
La FINUL ha recordado que Israel "ha pedido reiteradamente a la FINUL que abandone sus posiciones a lo largo de la Línea Azul" que funciona como frontera entre Líbano e Israel y que "ha dañado deliberadamente posiciones de la ONU".
Sin embargo, "a pesar de la gran presión ejercida sobre la misión y sobre los países contribuyentes con efectivos militares, las fuerzas de mantenimiento de la paz se mantendrán en todas sus posiciones". "Vamos a seguir realizando nuestras funciones conforme al mandato para observar e informar", ha subrayado la misión.
Al menos cinco militares de la FINUL han resultado heridos en los últimos días en ataques israelíes en el sur de Líbano y otros 15 resultaron afectados por una cortina de humo lanzada para facilitar la extracción de dos carros de combate israelíes que entraron en una posición de la FINUL en medio de un combate, lo que ha provocado críticas por parte de países implicados en el contingente.
La FINUL, establecida en 1978, está integrada por unos 10.500 soldados de unos 50 países que velan por el alto el fuego entre Israel y Líbano. España aporta unos 650 efectivos, incluido su general al mando, Aroldo Lázaro.
El 1 de octubre, las Fuerzas Armadas israelíes lanzaron una invasión por tierra en Líbano con el objetivo declarado de atacar a las milicias del partido chií Hezbolá, lo que ha agravado la situación de las fuerzas internacionales.