La explosión sucedió en una zona ubicada entre los campos de gas de Koniko, el mayor del país, y Al Yafra, a orillas del río Éufrates, donde murieron decenas de civiles y resultaron heridas un número indeterminado de personas.
Según fuentes consultadas por la ONG, el atentado, perpetrado con un coche bomba, causó una segunda explosión, que se cree que puede ser de un camión cisterna que transportaba combustible.
El Observatorio ha indicado que centenares de personas han huido de los combates en Deir al Zur y no consiguen alcanzar los campamentos de desplazados porque las fuerzas desplegadas en la zona no les franquean el paso para identificar si entre los civiles se ocultan yihadistas.
Actualmente el ejército sirio y las Fuerzas de Siria Democrática (FSD), milicias lideradas por kurdos, llevan a cabo sendas ofensivas contra Daesh en puntos diferentes de la provincia de Deir al Zur, fronteriza con Irak.