De las víctimas mortales, al menos 24 eran civiles; 7, guardias y agentes de policía, y se desconoce la identidad del resto. En declaraciones, el jefe del Departamento de Policía de la capital, el teniente general Mohamed Jeir Ismail, cifró a los fallecidos en 30. Hoy se cumple el sexto aniversario del inicio del conflicto en el país árabe, que ha causado más de 321.000 muertos.
"El terrorista iba vestido con un uniforme militar y llevaba una ametralladora y una granada. Cuando le dieron el alto en el puesto de control (de la entrada) comenzó a correr, entró en el vestíbulo del Palacio de Justicia y se inmoló a las 13.20 hora local (11.20 GMT)", relató Ismail.
El oficial de la Policía destacó que el inmueble estaba "abarrotado de civiles inocentes" en ese momento. El Palacio de Justicia está cerca del famoso mercado de Hamidiye, el bazar del centro damasceno. La televisión oficial siria mostró imágenes del interior del lugar, donde hubo grandes destrozos y se apreciaban manchas de sangre en el suelo y las pareces.
Por otro lado, varias personas fallecieron o resultaron heridas por una segunda explosión cometida por otro suicida dentro de un restaurante en la zona de Al Rabua, en el noroeste de la capital, informó la agencia de noticias estatal SANA. Estos ataques se producen después de que el sábado al menos 74 personas perecieran, la mayoría peregrinos procedentes de Irak, según el Observatorio, en un atentado en el centro de la capital que fue reivindicado por la alianza de la exfilial siria de Al Qaeda.
Los medios de comunicación oficiales rebajaron la cifra de víctimas mortales en ese ataque a 40 y apuntaron que hubo 120 heridos.