El Departamento de Justicia abre una investigación sobre abusos sexuales de la Iglesia Católica en Pensilvania
El Departamento de Justicia de Estados Unidos ha abierto una investigación sobre el abuso sexual contra menores cometido por sacerdotes en Pensilvania, según han informado este jueves seis diócesis de la Iglesia Católica Romana.
La investigación es la primera a nivel estatal por parte de las autoridades federales sobre denuncias de abuso sexual y encubrimiento por parte de la Iglesia Católica en Estados Unidos, según grupos que representan a las víctimas. La Iglesia de Chile, Australia e Irlanda también se están recuperando de las crisis de abuso sexual de menores y las encuestas demuestran que los escándalos han empeorado la confianza en la Iglesia y el Papa.
La diócesis de Pensilvania ha confirmado que ha recibido citaciones federales después de un informe de un gran jurado estatal que afirma que más de 300 sacerdotes católicos en Pensilvania habían abusado sexualmente de niños durante 70 años. Associated Press informó por primera vez sobre la investigación del Departamento de Justicia este jueves.
La diócesis de Allentown, Erie, Harrisburg, Filadelfia, Pittsburgh y Scranton han señalado que están cooperando con la investigación.
Un informe de 884 páginas que se hizo público en agosto por el fiscal general de Pensilvania, Josh Shapiro, después de una investigación de dos años contenía ejemplos gráficos de niños que fueron acosados y abusados sexualmente por clérigos. El informe cita a 301 sacerdotes, algunos de los cuales ya han fallecido.
El presidente de la Red de Supervivientes de Víctimas de Abusos de Sacerdotes (SNAP, según sus siglas en inglés), Tim Lennon, ha señalado que la investigación ha tardado mucho en llevarse a cabo. Cuatro grandes jurados en todo el estado de Pensilvania identificaron desde 2003 a unos 500 presuntos depredadores sexuales entre clérigos o exclérigos católicos, según Lennon.
"¿En qué otra institución podrías tener 500 delincuentes y no ser imputados?", ha preguntado Lennon, que ha asegurado que fue violado por un sacerdote católico cuando era niño. Lennon ha afirmado que SNAP había pedido al gobierno federal tres veces desde 2002 que se llevara a cabo una investigación a nivel nacional de 15.000 clérigos católicos activos o retirados, acusados de abusar sexualmente.
"Esta es la primera vez. La Policía Federal ha guardado un silencio tremendo sobre el problema del abuso católico y ya es hora", ha manifestado Anne Barrett-Doyle, codirectora de BishopAccountability.org, un centro que rastrea casos de abuso administrativo en todo el mundo.
Barrett-Doyle ha afirmado que la única otra investigación federal estadounidense era la de un obispo en Boston a principios de la década de los 2000. En septiembre, los obispos católicos de Estados Unidos dijeron que establecerían una línea directa para acusaciones de abuso sexual contra obispos y otros líderes de la Iglesia o denuncias de encubrimientos por parte de esas personas.