El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha acudido este miércoles a un homenaje a los caídos por la independencia de Letonia como parte de su gira por los países bálticos. La ofrenda floral tuvo lugar en la capital del país, Riga, junto al monumento construido en 1935 en honor a los soldados letones que combatieron en la guerra por la independencia.
Durante el acto, una pareja de asistentes desplegó una estelada justo detrás de Sánchez y el resto de la delegación española y letona. Sin embargo, estuvieron en silencio, aunque mantuvieron la bandera los 5 minutos que duró el homenaje.
En rueda de prensa desde Riga, fue preguntado por el encuentro entre Puigdemont y Junqueras y respondió que no pueden "seguir anclados en 2017" y, por ello, les ha instando a mirar "hacia adelante" y avanzar en el "reencuentro" para superar el "desgarro" que se produjo, y sobre todo, a centrarse en luchar contra la pandemia del covid, que es lo que le "urge" a la ciudadanía.
Sánchez apuesta por "superar el 2017"
Sánchez ha defendido que la posición del Gobierno sobre el denominado conflicto catalán "es clara", y pasa por esa agenda del reencuentro, para superar ya el desafío independentista de 2017, con medidas por ejemplo como los indultos. "Hay que aprender de los errores que se cometieron, por parte del independentismo. Tendrán que hacerlo", ha exigido, al tiempo que ha insistido en la necesidad de que el Govern abra un proceso de diálogo "con la otra parte de Cataluña que no comparte sus tesis independentistas".
Por ello, ha afirmado que si algo ha demostrado la pandemia es precisamente que "todo" el mundo es necesario, sobre todo en este momento en el que, según el presidente, la preocupación principal de los catalanes es superar la pandemia, en un momento en el que los contagios están volviendo a crecer, con especial incidencia en Cataluña.