En un discurso desde la Casa Blanca un día después de regresar del viaje de 12 días, Trump subrayó que "el mundo vio a unos Estados Unidos fuertes, orgullosos y confiados".
El mandatario señaló que los desafíos que encara Washington a nivel mundial fueron "heredados" de pasadas administraciones, a los que no citó. Estos retos, afirmó, son fruto de "errores nacidos de la indiferencia y la negligencia (...) o de un pensamiento ingenuo y juicios equivocados".
Se trata de la primera intervención pública de Trump tras su gira asiática y en ella comentó las diferentes paradas de su viaje, en el que, aseguró, comprobó que se había recuperado el "respeto" por Estados Unidos.