Con el izado de la bandera estadounidense se cerrará hoy una herida diplomática abierta hace más de 50 años.
En el malecón de la Habana se ensaya cada paso de la ceremonia oficial que el secretario de estado de EEUU presidirá para reabrir la embajada de su país. Fue después del encuentro entre Raúl Castro y Barack Obama cuando se anunció este paso histórico.
Tuvieron que cumplirse algunos requisitos como la salida de Cuba de la lista de EEUU de países patrocinadores del terrorismo y el fin de las restricciones a los cubanos para viajar hasta el país norteamericano.
Sin embargo, aún quedan importantes asuntos pendientes: el cierre de Guantánamo, el levantamiento del bloqueo ecónomico desde Washington o el cese de las violaciones de derechos humanos por parte de las autoridades caribeñas.
La reapertura de la embajada tiene lugar un día después del 89 cumpleaños de Fidel Castro. El mandatario lo ha celebrado arropado por dos líderes aliados: Evo Morales y Nicolás Maduro. Castro aprovechaba el momento para exigir a EEUU una indeminización económica por todos los años de embargo.