Michael Flynn, exasesor de seguridad nacional del presidente de Estados Unidos Donald Trump, se declaró hoy culpable de haber mentido al FBI sobre sus conversaciones con el embajador ruso en Estados Unidos, hechos por los que podría ser condenado a cinco años de cárcel.
En una audiencia en la corte del Distrito de Columbia, Flynn se declaró culpable de haber mentido sobre sus contactos con el embajador ruso en Estados Unidos, Serguéi Kisyliak, y se comprometió a colaborar con el fiscal especial de la investigación rusa, Robert Mueller, lo que podría desembocar en más imputaciones.
Según reconoció hoy, durante un interrogatorio el 24 de enero Flynn mintió al FBI sobre el diálogo que tuvo con el embajador ruso en Estados Unidos respecto a unas sanciones que el entonces presidente Barack Obama impuso a Rusia el 29 de diciembre de 2016 por su papel en el robo de documentos al Partido Demócrata.
Durante la audiencia en el citado tribunal, el juez Rudolph Contreras preguntó a Flynn: "¿Cómo se declara de los cargos que se le imputan?", a lo que el acusado respondió con la palabra "culpable" para luego firmar su declaración de culpabilidad, por la que renuncia al derecho a un juicio.
El representante de la fiscalía especial aseguró que Flynn informó de sus conversaciones con el embajador ruso a "importantes miembros" del equipo que preparaba la transferencia de poder entre Obama y Trump, quien tomó posesión del cargo el 20 de enero.
En concreto, según la fiscalía especial, Flynn llamó por teléfono a miembros del equipo de transición que estaban en el exclusivo club de Trump en Mar-a-Lago, en la costa sureste de Florida.
Según la fiscalía especial, las conversaciones de Flynn con el embajador ruso estaban dirigidas por importantes miembros del equipo de Trump, lo que significa que Flynn no actuó por iniciativa propia, sino que supuestamente sus acciones formaban parte de una estrategia colectiva.
Las conversaciones que el exasesor presidencial tuvo con el embajador ruso supusieron un escándalo porque entonces Obama aún era presidente y el equipo de Trump no estaba autorizado para tomar decisiones con Gobiernos extranjeros.
Trump pidió a Flynn que dimitiera el 13 de febrero por haber mentido al vicepresidente, Mike Pence, y a otros altos oficiales sobre el contenido de esas conversaciones con el embajador ruso.
El proceso contra Flynn es producto de la investigación que en mayo comenzó Mueller para examinar los posibles lazos entre Rusia y la campaña de Trump para influir en las elecciones presidenciales de 2016 y favorecer la victoria del magnate republicano.