"Hubo una red internacional sin la cual estos ataques no habrían tenido éxito"

El Gobierno de Sri Lanka cree que los atentados fueron perpetrados con ayuda de una "red internacional"

En Sri Lanka ningún grupo se ha atribuido la cadena de atentados contra iglesias y hoteles en la que 290 personas fueron asesinadas ayer y 500 resultaron heridas. En un registro la policía ha encontrado 87 detonadores de bombas en una estación de autobuses y todo indica que los ataques se planificaron con ayuda de una red internacional en vista del entrenamiento de los terroristas y la gran cantidad de explosivos. El arzobispo de Colombo ha pedido al Gobierno que detenga cuanto antes a los responsables y ha hecho un llamamiento a la población para que mantenga la calma

Ángel Gonzalo | Europa Press

Madrid | (Publicado 22.04.2019 13:14 )

El Gobierno de Sri Lanka cree que los atentados que acabaron con la vida de al menos 290 personas y dejaron más de medio millar de heridos en varios hoteles e iglesias el Domingo de Resurrección fueron perpetrados con la ayuda de una "red internacional", según ha contado este lunes el portavoz del Ejecutivo, Rajitha Senaratne.

"Nosotros no creemos que estos ataques fueran llevados a cabo por un grupo de personas confinadas en este país", ha indicado el portavoz del Ejecutivo ceilandés. "Hubo una red internacional sin la cual estos ataques no habrían tenido éxito", ha remachado.

Posteriormente, el portavoz del Ejecutivo ceilandés ha señalado que los atentados habrían sido obra del grupo Nacional Towheed Jamath (NTJ), un grupo islamista local poco conocido. Hasta el momento, ningún grupo ha reivindicado la autoría de la cadena de ataques.

Por su parte, Ariyananda Welianga, investigador de la División Forense de la Policía ceilandesa, ha dicho que los ataques fueron perpetrados por siete terroristas suicidas contra iglesias y hoteles de lujo. Dos suicidas detonaron su carga en el hotel Shangri-La, en Colombo, los restantes los hicieron en tres iglesias y en otros dos hoteles.

También fueron atacados un cuarto hotel y una casa de un suburbio de Colombo aunque las autoridades no tienen claro cómo se llevaron a cabo esos ataques. "Las investigaciones todavía continúan", ha explicado Welianga, en una comparecencia ante la prensa.

La Presidencia de Sri Lanka ha anunciado que a partir de la medianoche del lunes al martes declarará el estado de emergencia nacional para centrar los esfuerzos en la investigación de los ataques y la lucha antiterrorista.

La medida de excepción incluye una serie de iniciativas para reforzar las capacidades de las fuerzas de seguridad. Además, el Ejecutivo ha decidido decretar el martes como día de luto nacional por los ataques del Domingo de Resurrección. La decisión de decretar el estado de emergencia nacional ha sido adoptada por el presidente del país, Maithripala Sirisena, en la reunión que ha presidido este lunes del Consejo de Seguridad Nacional ceilandés.

El mandatario ha emplazado a todos los embajadores y representantes diplomáticos en Sri Lanka para que soliciten apoyo internacional para el país tras los brutales atentados del domingo. La petición del presidente ceilandés se basa en la información aportada por los servicios de Inteligencia de Sri Lanka, que han apuntado a la implicación de organizaciones terroristas internacionales en los ataques.

"Los informes de Inteligencia señalan que hay organizaciones terroristas extranjeras detrás de los terroristas locales. Por tanto, el presidente va a pedir la ayuda de otros países", ha indicado la Presidencia ceilandesa en un comunicado.

El mandatario también ha ordenado a las fuerzas de seguridad que pongan en marcha un plan de seguridad para proteger todas las iglesias católicas y a los miembros de esta comunidad religiosa y ha decretado un toque de queda que estará en vigor desde las 20.00 horas hasta las 4.00 horas del martes.

La Policía de Sri Lanka ha detenido este lunes a 24 personas por su presunta relación con la ola de atentados registrada el Domingo de Resurrección, que ha dejado un balance de 290 muertos y más de 500 heridos.