Minneapolis despidió este jueves a su vecino George Floyd en una ceremonia religiosa a la que fueron invitados su familia, amigos y líderes de la comunidad afroamericana de la ciudad y de Estados Unidos. El reverendo Jesse Jackson estuvo presente junto con Martin Luther King III, uno de los hijos del reverendo Martin Luther King y también habló Al Sharpton, un conocido líder negro neoyorquino.
"Lo que pasó a Floyd ocurre cada día en este país y en cada faceta de nuestras vidas, es la hora de que nos levantemos y digamos: Quitad nuestras rodillas de nuestros cuellos", manifestaron.
La ceremonia, la primera de tres actos funerarios en honor del afroamericano asesinado por cuatro policías de Minneapolis fue retransmitido a toda la nación y miles de personas se reunieron en Washington, Los Ángeles y en el barrio neoyorquino de Brooklyn.
Al final Floyd fue despedido por 8 minutos y 46 segundos de cánticos, el mismo tiempo que tuvo que soportar la rodilla de policía sobre su cuello que le dejó sin respiración y acabó con su vida.