Un coche bomba ha explotado cerca del cuartel general de la Policía en la provincia de Van, ubicada en el este de Turquía, en la frontera con Irán, según ha informado la agencia de noticias pública Anatolia. Varias ambulancias se dirigen ya al lugar de la explosión, aunque de momento se desconoce el balance de víctimas, de acuerdo con los medios de comunicación locales.
Ningún grupo armado ha reivindicado aún la autoría de este ataque. El Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), que tiene su bastión en el sureste de la nación euroasiática, suele atentar contra las fuerzas de seguridad turcas. El PKK, considerado una organización terrorista por Estados Unidos y la UE, reanudó en julio de 2015 sus 30 años de lucha armada contra el Estado turco para reclamar la independencia de la región meridional, de mayoría kurda. Desde entonces, los enfrentamientos entre el PKK y las fuerzas turcas han dejado más de 600 bajas --entre militares, policías y civiles-- y 7.000 en el lado kurdo, de acuerdo con las cifras oficiales facilitadas por el Gobierno.