Fethullah Gulen, el clérigo turco asentado en Estados Unidos, a quien el Gobierno turco le ha atribuido el golpe de Estado llevado a cabo este viernes en Turquía, ha apuntado este sábado la posibilidad de que este haya sido simulado y ha apelado a la población turca a no considerar algo positivo una intervención militar.
"Hay una pequeña posibilidad. Cabe la posibilidad de que haya sido un golpe simulado", ha afirmado Gulen en declaraciones a la prensa desde Saylorsburg, en Pennsylvania, donde reside.
Gulen ha argumentado que la democracia no se logra a través de una acción militar y ha cargado contra el Gobierno del presidente Recep Tayyip Erdogan. "Parece que no toleran ningún movimiento, a ningún grupo, a ninguna organización que no esté bajo su control", ha argumentado el líder religioso.