La Fiscalía de Panamá ha concluido --tras 27 horas-- el registro en la sede principal de Mossack Fonseca, situada en la capital del país, Ciudad de Panamá, y las autoridades se llevan "gran cantidad de documentación", según ha detallado Javier Caraballo, el fiscal Segundo Especializado contra la Delincuencia Organizada.
Caraballo ha reconocido que tanto él como su equipo de trabajo llevan "casi dos días sin haber dormido", en el marco de la investigación por los llamados 'Papeles de Panamá', que apuntan a esta empresa panameña como responsable de prácticas ilegales, a través del establecimiento de sociedades 'offshore' en paraísos fiscales.
Las autoridades encargadas del registro de las oficinas de Mossack Fonseca no hallaron documentación física, ya que la compañía tiene más de un centenar de servidores virtuales, según detalla el diario local 'La Prensa'. Al ser preguntado por el motivo por el que se tardó tanto en llevar a cabo el registro de las oficinas de Mossack Fonseca, el fiscal ha respondido que "las diligencias judiciales de este tipo requieren una planificación para que sean efectivas".
Por el momento no hay acciones contra el bufete de abogados. Una vez que la información recabada sea analizada, el agente de instrucción decidirá si se solicitan asistencias judiciales a otros países.
La fiscal general de Panamá, Kenia Porcell, ha informado este mismo miércoles de que ya ha dialogado con los fiscales generales de Perú, Venezuela, Guatemala, Costa Rica y El Salvador. A todos les ha asegurado que se les brindará colaboración y les ha garantizado un procedimiento "transparente".
Mossack Fonseca asegura que sus negocios son completamente lícitos y que el único crimen fue la sustracción ilegal de más de 11,5 millones de documentos de sus servidores.