Tras haberse reunido en el Elíseo con el primer ministro británico, David Cameron, el jefe de Estado galo dijo estar "convencido" de la necesidad de acelerar la incursión aérea en el país.
Hollande, que abrió con Cameron su maratón diplomático que le llevará a reunirse esta semana con los líderes de Estados Unidos, Rusia, Alemania, la Unión Europea y la ONU, aseguró que la prioridad es "destruir al EI", para lo cual "es necesario que los bombardeos sean lo más eficaces posible".
Hollande aseguró que el portaaviones francés Charles de Gaulle, operativo a partir de hoy en el Mediterráneo oriental, "tiene el mandato claro de golpear fuerte al EI".
Además, aseguró que los bombardeos cuentan con el respaldo del Consejo de Seguridad de la ONU, que aprobó la pasada semana una resolución al respecto en la cual también se preconizaba una solución política a la situación de Siria.
En ese sentido, Hollande afirmó que "es preciso constituir un Gobierno de unión" en el que el actual presidente sirio, Bachar Al Asad, "no puede ser el futuro" porque "ha contribuido a masacrar a su población".