El jefe del Ejecutivo declaró a la prensa tras la reunión del Consejo de Ministros su "profunda emoción" por el impacto del seísmo en varias localidades y que ha causado la muerte al menos a 250 personas, según los últimos datos oficiales. El Gobierno italiano ha decretado el estado de emergencia y ha aprobado un primer paquete de ayudas por valor de 50 millones de euros.
El seísmo se registró la madrugada del miércoles, tuvo una intensidad de 6,2 grados en la escala Richter y los equipos de rescate intentan en varias localidades hallar supervivientes, aunque solamente se recuperaron cadáveres.