El grupo chií libanés Hezbolá se desvinculó del lanzamiento de proyectiles este sábado hacia Israel, que fueron interceptados por el Ejército de ese país, que respondió con bombardeos aéreos de varias aldeas del sur del Líbano.
"Hezbolá niega cualquier implicación en el lanzamiento de cohetes desde el sur del Líbano hacia los territorios palestinos ocupados (Israel)", dijo la formación pro iraní en un comunicado en Telegram.
Consideró que "las acusaciones del enemigo israelí son pretextos para justificar sus continuos ataques contra el Líbano, que no han cesado desde que se anunció el alto el fuego" pactado por ambas partes el pasado 27 de noviembre.
Israel lanzó una quincena de ataques contra aldeas del sur del Líbano tras interceptar tres lanzamientos de proyectiles desde el sur del Líbano hacia el norte del Estado judío, los primeros desde que el alto el fuego entró en vigor. En esos bombardeos aéreos israelíes al menos dos personas murieron y otras diez resultaron heridas, según la Defensa Civil libanesa.
En el comunicado, Hezbolá afirmó que el grupo "reitera su compromiso con el acuerdo de alto el fuego", y que "apoya al Estado libanés al abordar esta peligrosa escalada sionista contra el Líbano".
El presidente libanés, Joseph Aoun, condenó los lanzamientos de proyectiles hacia Israel, al considerar que arrastrarían al Líbano a un "nuevo ciclo de violencia", y pidió investigar "lo sucedido". En esta línea, el jefe de Estado aseguró que "lo que ocurrió hoy en el sur (...) constituye un ataque persistente contra el Líbano y un golpe a su proyecto de rescate".
Tras varios meses de escalada en 2024, que incluyó intensos ataques aéreos israelíes contra varias partes del Líbano y la entrada de tropas terrestres por la frontera sur, Hezbolá e Israel firmaron un acuerdo de alto al fuego por un período de 60 días, que expiró el 26 de enero.
La tregua se prorrogó hasta el 18 de febrero, cuando las tropas israelíes se retiraron de casi todos los territorios que había ocupado en el sur del país. Sin embargo, el Ejército de Israel mantiene su presencia en cinco colinas dentro del Líbano contraviniendo los acuerdos y sigue atacando puntualmente objetivos vinculados al grupo chií, aliado de Irán.