Los fallecidos son una mujer y un ciclista alcanzados por los disparos que el detenido realizó a bordo del vehículo en el que viajaba y con el que se dio a la fuga. Poco después era arrestado en una gasolinera en la localidad de Bad Windsheim. Según algunas informaciones, habría sido reducido por los empleados después de que entrara en el establecimiento.
La Policía ha establecido un cordón de seguridad en torno a la gasolinera, ya que no está descartado que pueda haber explosivos dentro del vehículo. Por el momento, se desconocen los motivos del asesino.