Salvador Ramos, adolescente de 18 años, acabó con la vida de al menos 21 personas en un tiroteo en una escuela de Texas. En total, 19 de ellos eran niños de entre 7 y 11 años, y las otras dos personas eran profesoras que trataron de protegerles.
El tiroteo se produjo en Uvalde, un pueblo del estado de Texas que se encuentra a unos 140 kilómetros de San Antonio y a unos 100 kilómetros de la frontera con México.
Salvador Ramos, el asesino: 18 años y aficionado a las armas
Del asesino se conoce su identidad, Salvador Ramos, y que acababa de cumplir 18 años. El gobernador de Texas, Greg Abbott, explicó a los medios de comunicación que Ramos mató a su abuela en su domicilio antes de dirigirse hasta el colegio. Empotró el coche en una de las entradas y fue disparando a toda persona con la que se iba cruzando, sin importarle si era adulto o niño.
Después de asesinar a varias personas, formó una trinchera para enfrentarse a la policía, pero fue abatido minutos después. Según las investigaciones, Salvador Ramos publicó fotografías de su arsenal de armas en Instagram.
Antes de llevar a cabo la matanza, envió un mensaje a un usuario no identificado insinuando que planeaba un ataque: "Tengo un pequeño secreto. Quiero decírtelo. Agradece que te etiqueté". Tras el suceso, su perfil ha sido eliminado de Instagram y las autoridades han procedido a la investigación.
Ceremonia de homenaje para los menores asesinados
Los hechos ocurrieron a las 11:30 horas (hora local en EEUU), en la que era la última semana de las clases previa a las vacaciones escolares.
El director de la escuela de Uvalde anunció que el centro solo abrirá sus puertas para oficiar una ceremonia en recuerdo a los menores asesinados.
Tercer tiroteo más mortal en una escuela en EEUU
Se trata del tercer tiroteo en un centro escolar más mortífero de la última década. En Newton (Connecticut), 26 personas murieron en 2012, mientras que en un Instituto de Secundaria de Parkland (Florida) fueron asesinadas 17 personas el pasado año 2018.
Estados Unidos ha registrado ya 215 tiroteos en lo que va de año, con una media semanal de diez ataques. Según datos del FBI, los tiroteos masivos aumentaron el año pasado un 50%, y un 96% desde 2017.
