El resultado de los próximos comicios es incierto, pero los sondeos sacan la conclusión de que los ciudadanos parecen más interesados en que se resuelvan las desigualdades sociales y menos en la seguridad del país frente a las amenazas internacionales, en particular de Irán.
A Netanyahu puede pasarle factura en las urnas esa campaña por la seguridad que llevó hasta el Congreso de EEUU para censurar la actitud negociadora de la Casa Blanca con Teherán.