Un grupo de bomberos de la región italiana de Sicilia están siendo investigados por posible fraude en relación con una serie de incendios que tuvieron lugar en 2013.
Las fuerzas de seguridad han indicado que los voluntarios, que aún no han sido identificados, habrían provocado los incendios esperando a que alguien llamara para denunciarlos. En otras ocasiones, habrían pedido a familiares o amigos que hicieran una llamada a los servicios de emergencia para registrar fuegos inexistentes.
La investigación fue abierta después de que las autoridades se dieran cuenta del significativo aumento de llamadas cuando los voluntarios estaban trabajando. La Policía ha informado de que los bomberos provocaban los incendios para que su servicio fuera solicitado y así poder cobrarlo con posterioridad.
El sur de Italia, especialmente Sicilia, ha sido un foco común de incendios debido a la sequedad de la zona y a la escasez de precipitaciones.