Alrededor de 150 millones de niñas en todo el mundo, es decir, una de cada diez, han sufrido violaciones o algún tipo de violencia sexual en su vida, según ha denunciado la ONG Plan Internacional, subrayando que la mitad de dichas agresiones las sufren menores de 16 años. Según ha recordado con motivo de la celebración este viernes del Día Internacional de Eliminación de la Violencia contra la Mujer, las niñas sufren en mayor medida formas de discriminación y violencia como el matrimonio infantil, que afecta a 15 millones de niñas cada año; la mutilación genital femenina, de la que han sido víctimas 200 millones de niñas y mujeres; y los embarazos adolescentes, que acarrean complicaciones que suponen la principal causa de muerte en menores de 19 años.
"La violencia de género es una pandemia que viola los derechos de las niñas en todo el mundo", ha subrayado la directora general de Plan Internacional en España, Concha López. "Plan International solicita el compromiso de los gobiernos para poner en marcha las partidas y acciones necesarias para cumplir las promesas realizadas en los Objetivos de Desarrollo Sostenible, que marcan como meta eliminar todas las formas de violencia contra las mujeres y las niñas en el ámbito público y privado para 2030", ha añadido. La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que el 35% de las mujeres de todo el mundo ha sufrido violencia física y/o sexual en algún momento de su vida. Sin embargo, algunos estudios nacionales demuestran que hasta el 70% de las mujeres ha experimentado violencia física y/o sexual por parte de un compañero sentimental durante su vida, según Plan.
En el caso de la violencia de género en las escuelas, la ONG ha subrayado que se trata de "una violación de los Derechos Humanos y del derecho a la educación y limita la participación y el acceso de las niñas a una educación segura y de calidad, incrementando las tasas de abandono y fracaso escolar". Un estudio que realizó Plan en once países de todo el mundo en 2014 puso de manifiesto que un 28% de las niñas nunca se siente segura en el camino al colegio, y una de cada cuatro jamás se siente cómoda usando los aseos de las escuelas.
Cientos de niñas de estos países relatan incidentes de violación por parte de profesores, sexo por buenas notas, violencia y acoso en la escuela o en el camino hacia ella. Además, en la calle, las niñas viven situaciones de violencia de forma cotidiana. Este tipo de violencia contra las niñas tiene causas estructurales con raíces muy profundas entre las que destacan la pobreza, la desigualdad y la discriminación, ha explicado Plan, incidiendo en que la mayoría de estos actos de violencia ocurren sin formar parte de las estadísticas oficiales; menos aún si éstos ocurren en el hogar o en el lugar de trabajo de aquellos que sufren la violencia y son encubiertos como costumbres o prácticas tradicionales.
Plan International, que desde 2007 lidera el movimiento global Por Ser Niña, trabaja en 70 países para acabar con la desigualdad y todas las formas de violencia contra las niñas y transformar las relaciones de poder, de manera que todas las niñas del mundo puedan aprender, liderar, decidir y prosperar. Para transformar las escuelas y las comunidades en entornos seguros, inclusivos e igualitarios, libres de todo tipo de violencia, trabaja con los gobiernos y las organizaciones para hacer que los sistemas educativos se diseñen con enfoque de género y que las leyes y regulaciones sean efectivas en cuestiones de protección infantil.
Según ha subrayado, es fundamental contar con los niños y los hombres para conseguir un cambio verdadero y sostenible en el tiempo. El programa 'Campeones del Cambio' de Plan International sensibiliza a chicos y hombres sobre igualdad de género, para que ellos sean agentes de cambio en sus comunidades.