Cuatro de cada diez franceses fueron a votar en la segunda vuelta de las elecciones municipales celebradas este domingo. Una baja participación, con el 58% de la abstención, que pudo deberse al miedo a contagiarse por coronavirus.
Es el dato de participación más bajo desde los comicios de 2014 con una diferencia del 20%. Los ciudadanos no acudieron a las urnas pese a las medidas de seguridad para evitar los contagios del virus.
También ha influido los tres meses y medio de parón de la actividad política lo que ha hecho que la gente haya perdido interés y que se desmotive. No hubo campaña electoral y todo se ha basado en las redes sociales lo que ha propiciado esta falta de interés.
En el marco estíticamente político los resultados han propiciado un aumento de votos para Los Verdes que gobernarán en ciudades como Lyon o Estrasburgo.
Por su parte, Anne Hidalgo mantiene la alcaldía socialista en París con casi el 50% de los votos. En Perpiñán, el candidato del partido ultraderechista Unión Nacional, Louis Aliot, se ha impuesto con más del 50 por ciento de los votos al alcalde saliente, Jean-Marc Pujol, de la formación conservadora Los Republicanos.