El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, viaja hoy a Bruselas para participar en la reunión de jefes de Estado y de Gobierno de los 27 estados miembros de la Unión Europea, que se alargará hasta mañana jueves.
Los líderes de la Unión Europea usarán esta cumbre para llamar a la calma en Oriente Próximo ante el riesgo de una guerra regional, insistiendo en que Israel se abstenga de responder al ataque con drones y misiles de Irán tras comprometerse a extender las sanciones al sector de drones de Teherán para frenar el suministro a fuerzas afines en Líbano o Yemen.
Así, junto a la denuncia del ataque iraní sin precedentes -el lanzamiento de 300 drones y misiles sobre Israel en respuesta al bombardeo de su Consulado en Damasco- los líderes europeos pedirán "contención" a las partes para evitar cualquier acción que pueda escalar la crisis y desembocar en una guerra regional.
Aumentar las sanciones a Irán
Ayer martes, los ministros de Exteriores de la UE reunidos de emergencia por videoconferencia acordaron aumentar las sanciones que actualmente castigan el suministro de piezas y componentes de drones desde Teherán a Rusia en su invasión de Ucrania para que se usen también frente al envío de misiles y drones iraníes a fuerzas afines en la región, caso de Hezbolá en Líbano o los hutíes en Yemen.
El objetivo es limitar el suministro de armamento de Irán a fuerzas afines que generan tensión en la región.
Sánchez sigue luchando por el reconocimiento del Estado de Palestina
Aunque la Unión Europea expresa su solidaridad con Israel, sigue manteniendo su intención de solucionar la guerra en Gaza, donde la ofensiva israelí ha dejado más de 33.000 muertos en medio año.
En este contexto, Pedro Sánchez aprovechará la cumbre para seguir su ronda de contactos con líderes europeos para consensuar el reconocimiento del Estado de Palestina, con encuentros programados con los primeros ministros de Luxemburgo, Luc Frieden, de Malta, Robert Abella, y de Bélgica, Alexander De Croo.