Prime era la única ciudadana francesa que se encontraba secuestrada en la actualidad. Con una visera, gafas de sol, vestida de blanco y sonriente, Prime descendió del avión e intercambió unas palabras con Hollande antes de abrazar a sus padres y otros allegados.
"Los franceses que vivimos en el extranjero sabemos que Francia siempre nos respalda", aseguró Prime ante los numerosos periodistas que acudieron al aeropuerto.
La rehén liberada, que dijo que se encuentra "muy fatigada", aseguró que cuando fue secuestrada estaba a punto de abandonar Yemen, país que el resto de sus compañeros de trabajo ya habían dejado.
"Trabajaba en problemas de protección social y quería estar hasta el final, porque como francesa sé lo importante que es tener una educación y una sanidad públicas. En Yemen no hay, y cuando hay pobreza, sin educación y sanidad, puede conducir a los extremos", aseguró Prime.
El padre de la joven también habló a los periodistas y les agradeció "la discreción" con la que han tratado la retención de su hija, al tiempo que destacó el valor de los servicios franceses que en todo momento les hicieron entender que su hija estaba con vida.
Hollande, por su parte, aseguró que "Francia nunca abandona a sus compatriotas", pero pidió "extremar la prudencia" a aquellos que se encuentran en zonas de riesgo.
El presidente también agradeció la cooperación de la familia, que mantuvo la calma y la confianza en los servicios del Ministerio francés de Exteriores. Prime fue secuestrada por hombres armados el pasado 24 de febrero cuando se trasladaba en taxi a su trabajo en Sana acompañada de su intérprete, que también fue retenida por los captores.
Era la última trabajadora de su empresa que permanecía en el país, que atravesaba una situación turbulenta y donde trabajaba en un proyecto del Banco Mundial. En marzo pasado se anunció su liberación, pero finalmente solo se obtuvo la de su traductora.
Prime apareció en mayo pasado en un vídeo vestida totalmente de negro, visiblemente fatigada, en un vídeo enviado al diario francés "Ouest-France" que fue autentificado por las autoridades francesas y en el que pedía a los presidentes de Francia y Yemen que facilitaran su liberación y revelaba que había tratado de suicidarse en varias ocasiones.
En declaraciones a la cadena "iTELE", Fabius aseguró que según sus informaciones Prime estuvo a punto de morir y que si los servicios franceses no hubieran intervenido "estaría muerta".
El jefe de la diplomacia gala negó haber pagado un rescate para obtener su liberación, que aseguró que se consiguió a través de "negociaciones muy complejas" sobre las cuales "la regla exige ser extremadamente discreto".
En el comunicado que anoche anunció su liberación el presidente Hollande agradecía la cooperación de Omán, aunque Fabius no dio más detalles sobre la misma.
El presidente aseguró en Villacoublay que había telefoneado al sultán de Omán para agradecerle su cooperación con los servicios franceses que ha permitido liberar a la última francesa que estaba en cautiverio en el mundo.
Yemen atraviesa una grave crisis tras la toma de Sana por los milicianos hutíes en septiembre pasado, lo que motivó la huida del presidente, Abdo Rabu Mansur Hadi, refugiado en Arabia Saudí, que lidera una coalición de países árabes suníes que, desde marzo, bombardea posiciones de los rebeldes.
