El expresidente Luiz Inácio Lula da Silva, con el 48,39 % de los votos válidos en las elecciones de este domingo en Brasil, tendrá que definir la Presidencia en una segunda vuelta con el actual mandatario, Jair Bolsonaro, que obtuvo el 43,23 % de los votos, según los datos oficiales.
Lula y Bolsonaro se enfrentarán a una segunda vuelta
De acuerdo con el Tribunal Superior Electoral, tras haber sido escrutado el 99,86 %, ningún candidato ha logrado matemáticamente alcanzar más de la mitad de los votos, cifra que se necesita para garantizar la elección sin necesidad de segunda vuelta, y Bolsonaro ya no podrá superar a Lula.
La segunda vuelta de las elecciones en Brasil se celebrará dentro de cuatro semanas, el próximo 30 de octubre.
Lula confía en volver a ser presidente de Brasil
Tras los resultados, el dirigente progresista Lula ha celebrado su triunfo en las presidenciales con moderación, sabiendo que aún no tiene en su mano la victoria. Sin embargo, se muestra confiado en que ganará de nuevo la presidencia de Brasil y considera que este primer encuentro electoral es sólo una prórroga a su triunfo
Bolsonaro desconfía del sistema electoral
Por otro lado, el escaso margen con el que se ha impuesto Lula se ve ya por algunos analistas como una victoria para Bolsonaro, que llevaba semanas advirtiendo que los sondeos minusvaloraban el apoyo popular que tenía.
Hoy vencimos a la mentira. Ahora tenemos un segundo intento más adelante
El líder ultraderechista lleva durante toda la campaña poniendo en duda el sistema electoral brasileño. "Hoy vencimos a la mentira. Ahora tenemos un segundo intento más adelante. Entiendo que una parte de la población quiere cambios, pero hay ciertos cambios que pueden ir a peor", ha comunicado Bolsonaro.
Un Brasil dividido en dos
De esta primera vuelta queda un Brasil dividido en dos. En la mayor parte del norte del país -las regiones más pobres- ha ganado Lula. En la mayor parte del sur, incluido Sao Paulo, se ha impuesto Bolsonaro. Esta zona es la más rica del país y adonde se están trasladando más habitantes desde los estados norteños.
Si se confirma el giro a la izquierda de Brasil sería uno más que se une a los cambios que llevan sucediéndose en Iberoamérica desde 2018. Con triunfos de presidentes de esta ideología en México, Argentina, Bolivia, Perú, Honduras, Chile y Colombia.
Así, de ganar Lula las siete naciones más pobladas de Latinoamérica y sus seis mayores economías tendrían un gobierno de izquierdas.