El presidente francés, Emmanuel Macron, ha expresado su disposición a dialogar con todos aquellos dispuestos a trabajar en favor de los intereses de Francia en el marco de una nueva ronda de consultas para formar gobierno tras las recientes elecciones legislativas. Macron ha subrayado que "la puerta está abierta" y ha invitado a participar a quienes quieran colaborar para el bienestar del país.
Este martes, Macron se reunió con un grupo de diputados del partido independiente Liot y también tuvo un almuerzo de trabajo con François Bayrou, presidente del Movimiento Democrático, según informó la cadena francesa BFM TV. Sin embargo, algunos líderes políticos han rechazado participar en estas consultas.
El secretario del Partido Socialista, Olivier Fauré, se negó a reunirse con Macron, alegando que no quiere ser "cómplice de una parodia de la democracia". De igual manera, Marine Tondelier, secretaria de los ecologistas, criticó la situación y se negó a contribuir al "circo" montado en el Elíseo.
Macron ha optado por no invitar a los líderes de Agrupación Nacional, La Francia Insumisa (LFI) y el líder de Los Republicanos (LR), Eric Ciotti, a la ronda de consultas. Esto implica que cualquier posible alianza de derecha solo podría formarse con el partido independiente Liot y otros partidos menores. Macron también ha descartado proponer a alguien de la izquierda para la jefatura del Gobierno, citando la necesidad de mantener la estabilidad institucional.
El presidente no ha fijado un plazo concreto para la conclusión de estos contactos, aunque el Elíseo había sugerido que el inicio de los Juegos Paralímpicos de París el miércoles podría marcar un límite. De acuerdo con la Constitución francesa, el jefe de Estado tiene la potestad de designar un primer ministro, pero cualquier candidato debe ser confirmado por la Asamblea Nacional para asumir el cargo.