La secuencia de eventos sigue sin estar clara y en su mayoría proviene de testigos presenciales a los medios locales, como el vídeo grabado por el propio asesino disparando, matando y rematando a los heridos que iba encontrando a su paso.
En la primera mezquita -a la que corresponde la grabación en directo- ha dejado 41 muertos, pero hay ocho más en otra mezquita situada a más de cinco kilómetros de distancia, por lo que no se descarta la implicación de más personas en la matanza.
La primera ministra neozelandesa ha dicho que hay "múltiples escenarios involucrados en este incidente. La Policía irá ofreciendo más detalles cuando puedan conforme avance la situación, aunque no puedo dar ninguna confirmación en esta fase. Lo que puedo decir es que está claro que es uno de los días más negros para Nueva Zelanda".
El supuesto asesino -al parecer de 28 años- es australiano, no estaba fichado, pero minutos antes habría colgado en redes sociales un manifiesto supremacista y xenófobo.
Supuestamente, es en su coche donde se han detonado varios explosivos de forma controlada. A esta hora, hay dos detenidos más y la Policía desplegada en medio país.
La red social Facebook ha advertido de que cualquier fotografía o vídeo que vulnere las normas de la plataforma será eliminado con posibilidad de cancelar la cuenta en la que aparezca.
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