El ataque ha tenido lugar esta mañana, concretamente en la localidad de Dablo, en la provincia de Sanmatenga, y fue efectuado por un grupo de hombres armados que abrieron fuego nada más comenzar la misa.
Burkina Faso ha venido registrando en los últimos meses una creciente actividad de grupos yihadistas. En el país operan Ansarul Islam, un grupo terrorista autóctono, así como el Grupo para el Apoyo del Islam y los Musulmanes (JNIM), una organización yihadista que aglutina a otras cuatro, entre ellas AQMI y Al Murabitún, y en menor medida Estado Islámico en el Gran Sáhara (ISGS).
Según el 'think-tank' Africa Center for Strategic Studies (ACSS), el número de ataques obra de estos grupos pasó de tan solo tres en 2015, a doce en 2016, 29 en 2017 y 137 en 2018.