Miles de refugiados ucranianos, en su mayoría mujeres, niños y ancianos, están llegando a Italia a través de la frontera con Eslovenia, en el norte del país, tras huir de la guerra que asola su país, informaron este martes Unicef y Save the Children.
En cuatro días, las dos organizaciones han atendido a más de 1.600 refugiados que entraron al país a través de la frontera cercana a la ciudad italiana de Trieste (noreste), explicaron en un comunicado conjunto.
Los voluntarios distribuyen bienes de primera necesidad
Los voluntarios han distribuido bienes de primera necesidad como mantas, jabón, compresas, comida, agua y mascarillas FFP2, así como juguetes y libros para colorear a los niños que llegan y que representan al menos el 40 % del total.
A esta región fronteriza, a la que llegan entre 300 a 600 personas durante el día, más aquellos que acceden durante la noche, también se han desplazado mediadores culturales para dar apoyo psicológico a los refugiados.
"Los niños están agotados tras un largo y difícil viaje y tienen el miedo en sus ojos por lo que han visto. En muchos casos, las madres se sienten abrumadas por el sentimiento de responsabilidad por sus hijos y la angustia por los familiares que han dejado atrás", explicó la directora de los programas en Italia de Save The Children, Raffaela Milano.
Asimismo, la coordinadora de la Oficina Regional de Unicef para Europa y Asia Central en Italia, Anna Riatti, subrayó la necesidad de "garantizar una información adecuada en los principales puntos de entrada y tránsito, la identificación oportuna de los menores y la activación de canales de acogida que también impliquen a la sociedad civil, como el acogimiento familiar".
En total, 17.286 ciudadanos ucranianos han ingresado en Italia desde que comenzó la invasión de Rusia a Ucrania: 8.608 mujeres, 1.682 hombres y 6.996 menores, según datos actualizados del Ministerio del Interior, y la mayoría se han dirigido a Roma, Bolonia (centro), Milán (norte) y Nápoles (sur).
Ante esta situación la ministra italiana de Interior, Lucia Lamorgese, anunció ayer que los controles fronterizos se han reforzado para ayudar a los refugiados que han llegado y que podrían ascender hasta los 900.000.
