El ministro rumano de Comercio, Florin Jianu, ha anunciado este jueves que la conciencia y la ética le obligan a presentar su dimisión ante el decreto con el que el Gobierno socialdemócrata ha despenalizado ciertos casos de corrupción y que ha provocado una masiva protesta popular.
En un mensaje publicado en la red social Facebook, plantea "cómo podrá mirar a su hijo a los ojos" si se mantiene en el Ejecutivo.
Jiani explica que espera que el Gobierno rectifique lo que considera es un "error" para que pueda continuar su trabajo y pide que su renuncia no sea utilizada como arma política.
Más de 150.000 personas se manifestaron ayer en las principales ciudades rumanas para protestar contra el Gobierno por haber aprobado el martes por la vía de urgencia un decreto que despenaliza los casos de corrupción si causan pérdidas al Estado menores a 44.000 euros.
En los casos por debajo de esa cifra se iniciarán procedimientos administrativos y civiles para recuperar el dinero y castigar a los responsables.
El decreto ley del Gobierno del primer ministro, Sorin Grindeanu, quien asumió el cargo a principios de mes, ha generado fuertes críticas dentro y fuera del país y ha provocado las mayores protestas callejeras desde la caída del comunismo en Rumanía en 1989.
La oposición de centroderecha ha anunciado una moción de censura, el principal órgano judicial prepara un recurso contra la medida y el presidente del país, Klaus Iohannis, ha pedido la intervención del Tribunal Constitucional y que se celebre un referendo sobre el tema.