Los restos de la aeronave, que viajaba de la ciudad estadounidense de Las Vegas, en Nevada, a la norteña localidad mexicana de Monterrey, han sido localizados mediante vigilancia aérea en una región de difícil acceso en el municipio Ocampo.
Imágenes de televisión han mostrado fotografías de la aeronave hecha pedazos en medio de un paraje seco rodeado por múltiples montañas. El fabricante canadiense Bombardier ha indicado que el jet era un Challenger 601 y que desapareció a unas 150 millas náuticas de la ciudad mexicana de Monclova.
Asimismo, ha señalado que se puso en contacto con la junta de seguridad de transporte de Canadá y que trabajaría con autoridades de investigación. Entre los ocupantes del jet se encontraban 10 pasajeros y tres tripulantes, de acuerdo con el plan de vuelo, según ha explicado el gobierno de Coahuila, que más tarde ha confirmado el fallecimiento de todos ellos.