La misión Artemis ha despegado este miércoles desde el Centro Espacial Kennedy, en Florida (Estados Unidos) tras intentarlo cuatro veces.
Esta misión es el primer paso del objetivo final que planea la NASA que es poner en marcha una expedición en la que “la primera mujer y la primera persona no blanca” caminarán por el suelo lunar dentro de tres años.
Establecer la presencia en la Luna
Artemis I es una misión no tripulada que supone la primera del programa Artemis, cuyo objetivo es establecer presencia humana en la Luna como un paso previo para llegar a Marte.
El cohete SLS, con una altura superior a un edificio de 30 plantas (322 pies o 98 metros), se elevó con toda su fuerza a la 1.47 horas (6.47 GMT) abriéndose paso en la oscuridad de la noche junto con la nave espacial Orion acoplada.
Durante la preparación del despegue, la NASA detectó una "fuga intermitente" de hidrógeno líquido en la válvula de reabastecimiento en la etapa central del cohete y tuvo que enviar a la plataforma un "equipo rojo" de especialistas para ajustar los conectores.
Se ha tenido que retrasar cuatro veces
La última misión de la NASA en la que sus astronautas pisaron la Luna se remonta a Apolo 17, que se llevó a cabo entre el 7 y el 19 de diciembre de 1972.
La NASA quiere poner a prueba en este viaje 50 años después las capacidades del sistema de lanzamiento espacial (SLS) y de la nave Orión, que orbitará la Luna, antes de un viaje tripulado.
Artemis I lleva también al espacio 10 pequeños satélites CubSat que de manera autónoma realizarán diversas investigaciones científicas.
La NASA ha tenido que retrasar cuatro veces la partida de la misión, dos por causas meteorológicas, pero también en otras dos ocasiones por motivos técnicos.