Según cuenta el Daily Nation, fue a su escuela Kabiangek en el condado de Bomet (Kenia) donde su primera regla la tomó por sorpresa y le vino en mitad de la clase.
Sus compañeras aseguran que estaba confundida después de mancharse el uniforme y apenas podía concentrarse, lo que llamó la atención de la maestra que, lejos de aconsejarla, la comenzó a humillar llamándola "sucia" y echándola del aula.
La menor fue camino de su casa, donde poco después apareció ahorcada de un árbol cercano.
Los padres han denunciado la inacción policial y han liderado varias protestas hacia la escuela por la forma de comportarse de la profesora.
El Ministerio de Educación keniata obliga a los colegios a distribuir compresas cuando las menores las necesitan, ya que la mayoría de las niñas no pueden permitírselo.