La amenaza de cortar el suministro de gas, si no se paga en rublos, se cobra otra víctima. El gigante ruso del gas, Gazprom, ha anunciado que interrumpirá el suministro de gas a los Países Bajos a más tardar el miércoles, como reacción a la negativa del comerciante energético holandés GasTerra a pagar en rublos.
La medida de Gazprom era esperada tras el anuncio del presidente ruso, Vladimir Putin, de que todos los suministros de gas a Europa deberían pagarse en rublos. GasTerra ha reaccionado al anuncio y ha comunicado que ya se ha asegurado el suministro en otros lugares. La cancelación del contrato actual está prevista para el periodo comprendido entre el 31 de mayo y el 1 de octubre de 2022, y supone unos 2.000 millones de metros cúbicos de gas natural, es decir, alrededor del 5% del consumo anual de Holanda. GasTerra no ha dado detalles de dónde ha comprado el gas alternativo, pero parece que se trata de gas de Noruega o de GNL.
El ministro holandés de Energía y Clima, Rob Jetten, ha declarado que los efectos de la medida rusa son casi nulos, ya que no hay amenaza para ningún suministro físico de gas. Esto significa que los consumidores holandeses podrán seguir utilizando el gas natural como siempre.
Sin embargo, pese a su tranquilidad en el país siguen los crecientes temores no sólo de una mayor escasez en el mercado, sino también de otro impulso inflacionista, ya que los precios del gas al por mayor aumentarán sustancialmente. Los consumidores holandeses verán aumentar sus facturas como consecuencia de ello. Según la legislación holandesa, en épocas de escasez de energía, como la actual crisis del gas natural, las reducciones de volumen se producirán primero en varias industrias de alto consumo energético, lo que elevará los precios en un mercado que ya está lidiando con problemas en la cadena de suministro.
Moscú está subiendo la apuesta, después de haber bloqueado ya las entregas de gas a Polonia, Finlandia y Bulgaria. Los mercados del gas ya están sobrecalentados, y los volúmenes de GNL disponibles en el mercado al contado se siguen reduciendo.