Al menos tres personas han muerto y otras 700 han resultado heridas en dos nuevos terremotos de magnitud 6,4 y 5,8 en la provincia turca de Hatay, una de las once que hace dos semanas quedaron devastadas por dos seísmos que han causado causando la muerte de al menos 41.000 personas y heridas a más de 105.000.
Así lo anunció el ministro del Interior turco, Suleyman Soylu, ha confirmado el fallecimiento de tres personas ( uno en Anatolia, uno en Defne y uno en Samandag) y que otras 213 han resultado heridas en su territorio. Además, ha advertido de la posibilidad de que haya más personas atrapadas entre las ruinas de los edificios que han colapsado hoy.
Asimismo Soyly también ha apuntado que tras el primer terremoto se han producido 26 réplicas y ha solicitado a la gente que "no entren en edificios peligrosos. Hay mucho movimiento y puede ser muy peligroso".
470 heridos en Siria
Por otro lado, el Observatorio Sirio de los Derechos Humanos ha comunicado que 470 personas han resultado heridas por los seísmos en Siria, incluidos ciudadanos que han saltado desde balcones o alcanzadas por cascotes. Hasta 320 lesionados corresponden a zonas controladas por el Gobierno sirio y 150 se han contabilizado en el noroeste del país.
Concretamente, se han visto más afectadas las ciudades de Idlib, Alepo, Hama, Afrin, Azez, Jarablus, Tel Abiad. Además, en el Líbano se han sentido en Beirut, en Jordania, Irak, Israel, Palestina y Egipto.
El pasado 6 de febrero dos terremotos de 7,8 y 7,7 de magnitud en la escala de Richter causaron enormes daños en Turquía y Siria y se han cobrado, hasta el momento, la vida de más de 41.000 personas.
