Las sanciones anunciadas por la UE contra Rusia por la guerra en Ucrania han puesto el foco sobre la figura de los oligarcas rusos. El objetivo de dichas sanciones es seguir aislando a Moscú, además de otras medidas anteriores como la suspensión del país como miembro de FMI y el Banco Mundial o retirarle los beneficios en la Organización Mundial del Comercio.
Estas decisiones buscan atacar directamente a las élites rusas ampliando la lista negra de oligarcas y personas cercanas al gobierno de Putin. Los sectores de las criptomonedas y las exportaciones de lujo serán dos de los más perjudicados. La UE considera que mantienen vínculos con el régimen y son una fuente de ingresos para el Kremlin.
La presidenta de la Comisión Europea, Úrsula Von der Leyen, ya avanzó que se está trabajando en una gran prohibición en lo que a las inversiones europeas en el sector energético ruso se refiere con el objetivo de acabar con la dependencia del gas ruso. Además, el alto cargo de la UE para la Política Exterior, Josep Borrell, ha declarado que Europa seguirá imponiendo restricciones mientras continúe el ataque.
Qué es un oligarca ruso
El objetivo de estas restricciones no es otro que castigar la economía rusa y presionar a estos oligarcas para que se vuelvan contra Putin y le convenzan para parar la guerra. Pero, ¿qué es un oligarca ruso?
La palabra oligarca se ha asociado siempre a Rusia, y su término viene de 'oligos' (pocos) y 'archein' (gobierno). Trasladado al país ruso, son magnates de los negocios que tienen muchos recursos e influencia en la política nacional.
Son empresarios que tienen el control sobre diversos negocios, que acumularon riqueza tras la disolución de la URSS y que tuvieron conexiones desde Gorvachov hasta Putin, pasando por Boris Yeltsin.
Su poder llega a las altas esferas de Rusia a través de familiares o socios que se encuentran siempre cerca del gobierno, con rumores que también les sitúan en la órbita de organizaciones criminales relacionadas con el ejecutivo ruso.
Quiénes son los oligarcas rusos
Entre los llamados oligarcas rusos se encuentra el propietario del Chelsea, Roman Abramovich, que hace unos días había declarado su intención de vender el club. De momento las sanciones son el congelamiento de activos y las prohibiciones de viaje, por lo que el club podrá seguir compitiendo.
Desde que comenzó la invasión ha habido grandes presiones de los legisladores británicos para que se tomaran medidas contra los multimillonarios rusos, y es que Londres ha sido durante años el principal objetivo de los oligarcas rusos para mover su dinero.
Pero Roman Abramovich no es el único oligarca que se ha visto afectado por estas durísimas sanciones. El propietario del Chelsea tiene también negocios petroleros y metalúrgicos y al suyo se han sumado otra serie de nombres.
Nikolay Tokarev, presidente de Trasneft, empresa de transporte de gas y petróleo dirigida por el Kremlin. Es amigo personal de Putin desde que trabajaron juntos como agentes de la KGB en los años 80.
Igor Sechin es presidente del gigante petrolero Rosneft y es considerado por algunos la mano derecha de Putin.
Alisher Usmanov es un empresario con activos en los sectores del hierro, los minerales, el acero, los medios de comunicación e internet. Es considerado uno de los empresarios funcionarios del Kremlin.
Alexéi Mordashov es, según Forbes, el hombre más rico de Rusia. Amasa una fortuna de más de 25.000 millones de euros y es accionista de Severstal (siderurgia) y NordGold (minería).