La Organización de Naciones Unidas (ONU), considera que la celebración este sábado del Día Mundial de los Océanos es una "buena oportunidad" para explorar la cuestión de género en la relación entre los océanos y el ser humano y pide un esfuerzo a los ciudadanos para acabar con los plásticos en el mar.
Los océanos, que absorben cada año cerca del 25 por ciento del dióxido de carbono (CO2), celebran este sábado, 8 de junio, el Día Mundial de los Océanos, con el reto de enfrentar el problema de la contaminación por plásticos y la sobrexplotación de sus recursos.
La ONU, en una declaración emitida por el Día Mundial de los Océanos de 2019 quiere fomentar una mayor concienciación sobre el océano y las cuestiones de género y descubrir las posibles formas de promover la igualdad de género en actividades relacionadas con el océano, como la investigación científica marina, la pesca, el trabajo en el mar, la migración que se realiza por mar y la trata de personas, así como la formulación de políticas y gestión.
En términos ambientales, el océano absorbe cerca del 25 por ciento del CO2 que se emite a la atmósfera por la acción humana, lo que reduce el impacto de este gas en el clima. De hecho, la ONU destaca el papel como sumideros de carbono de los manglares, las marismas salinas y las praderas submarinas pueden contener una cantidad de carbono cinco veces superior a la de los bosques tropicales.
Por ello, la presidenta de la Asamblea General de la ONU, María Fernanda Espinosa, ha lanzado la campaña 'Play it out' para acabar con la contaminación por plásticos, ya que recuerda que después de décadas de uso excesivo y aumento del consumo de plásticos de un solo uso ha llevado a una "catástrofe ambiental mundial".
La campaña 'Play it out' reclama a los ciudadanos que se esfuercen por acabar con el uso del plástico, desde pajitas y bolsas de plástico.
El Día Mundial de los Océanos fue propuesto en la Cumbre de la Tierra de Río de Janeiro, en 1992 como una manera de celebrar los océanos que comparten los países del mundo, de generar conciencia sobre su papel en la vida humana entre otros objetivos.
Según datos de la ONU, los océanos contribuyen a regular el clima y el tiempo y proporcionan oxígeno y alimentos así como otros efectos beneficiosos para el medio ambiente y para la sociedad y la economía en general. Asimismo, son fuente de alimento y medicinas y parte fundamental de la biosfera, ya que los productos del mar son la principal fuente de proteínas para, al menos, una de cada cuatro personas en le mundo.
En la actualidad, aunque cubren más del 70 por ciento de la superficie de la Tierra, apenas está protegido el 1 por ciento de su superficie total. Entre la mitad y el 80 por ciento de la vida en la Tierra está bajo la superficie del océano, que constituye 90 por ciento del espacio habitable del planeta, aunque hasta ahora, menos del 10 por ciento de este espacio ha sido explorado hasta ahora por el ser humano.
El Objetivo de Desarrollo Sostenible número 14, se plantea la meta de prevenir y reducir significativamente la contaminación marina de todo tipo de aquí a 2025, en particular la producida por actividades realizadas en tierra, incluidos los detritos marinos y la polución por nutrientes.
Además, fija en 2020 la fecha límite para gestionar y proteger de manera sostenible los ecosistemas marinos y costeros para evitar efectos adversos importantes, incluso fortalecer su resiliencia, y adoptar medidas para restaurarlos a fin de restablecer la salud y la productividad de los océanos.
También en 2020 se deberá reglamentar de forma eficaz la explotación pesquera, acabar con la sobrepesca, con la pesca ilegal, no declarada y no reglamentada y las prácticas pesqueras destructivas y aplicar planes de gestión con fundamento científico para restablecer las poblaciones de peces en el plazo más corto posible y llegar al menos a niveles de producción del máximo rendimiento sostenible de acuerdo con sus características biológicas.
En 2020, además, al menos el 10 por ciento de las zonas costeras y marinas deberán estar conservadas; se deberán prohibir ciertas formas de subvenciones a la pesca que fomentan la sobrepesca y eliminar así como las que fomentan la pesca ilegal. En esa fecha no se deberán introducir nuevas subvenciones Igualmente señala que se debe buscar minimizar y abordar los efectos de la acidificación de los océanos, con mayor cooperación científica.
Por otro lado, de aquí a 2030 el reto pasa por aumentar los beneficios económicos de los pequeños Estados insulares en desarrollo y los países menos adelantados obtienen del uso sostenible de los recursos marinos, en particular mediante la gestión sostenible de la pesca, la acuicultura y el turismo.
Asimismo, se deberá facilitar el acceso de los pescadores artesanales a los recursos marinos y los mercados; mejorar la conservación y el uso sostenible de los océanos y promover un aumento del conocimiento científico y la transferencia de tecnología marina para favorecer la salud de los océanos.