"Creo que lo más importante hoy es felicitarse por este encuentro aunque la ruta sea larga para una solución a la crisis; lo que vemos en la península coreana es una primera etapa muy importante", afirmó Stoltenberg en una rueda de prensa durante la reunión de ministros de Exteriores de la Alianza que se celebra hoy en Bruselas.
El político noruego se mostró cauto y consideró que "falta mucho trabajo por hacer" y que "el hecho de que las dos partes consigan reunirse es una primera etapa".
Los líderes de Corea del Sur y Corea del Norte, Moon Jae-in y Kim Jong-un, celebraron hoy la primera cumbre intercoreana en once años y la tercera de su historia, y en ella escenificaron un primer paso hacia la reconciliación nacional y acordaron buscar la desnuclearización de la península de Corea.
"La presión que ha sido aplicada sobre Corea por la comunidad internacional ha sido importante", afirmó Stoltenberg en referencia a las sanciones políticas y económicas impuestas por la ONU a personas y entidades directamente implicadas en el programa de ensayos nucleares.
El político se mostró "plenamente convencido de que esta presión internacional incrementada ha permitido reunir las condiciones necesarias para esta cumbre" y acogió "el progreso y el compromiso que han mostrado" ambas partes "en resolver sus diferencias".
El líder de la Alianza agregó la necesidad de seguir aplicando estas sanciones "hasta que Corea del Norte modifique su comportamiento".