Condena el "vil e insensato crimen"

El Papa pide que se detengan quienes siembran el terror, tras el atentado en Lahore

El papa Francisco ha condenado el "vil e insensato crimen" en la ciudad paquistaní de Lahore y pidió orar para que "se detengan las manos de los violentos que siembran terror y muerte, y en el mundo pueda reinar el amor, la justicia y la reconciliación", tras el rezo del Regina Coeli.

ondacero.es

Madrid | 28.03.2016 19:36

El papa Francisco ayer, en la celebración de la misa de la Pascua de Resurrección, en la Plaza de San Pedro del Vaticano
El papa Francisco ayer, en la celebración de la misa de la Pascua de Resurrección, en la Plaza de San Pedro del Vaticano | Agencia EFE

Asomado a la ventana del palacio apostólico ante una Plaza de San Pedro rodeada de fuertes medidas de seguridad, Francisco recordó el "abominable atentado que ensangrentó la Pascua" ayer y que causó más de 70 muertos, sobre todo mujeres y niños, la mayoría de ellos "familias de la minoría cristiana concentradas en un parque para celebrar la Semana Santa".

"Deseo manifestar mi cercanía a todos aquellos que han sido golpeados por este vil e insensato crimen e invito a rezar al Señor por las numerosas víctimas y sus seres queridos", dijo.

Después realizó un llamamiento para que las autoridades civiles y todos los miembros de la sociedad paquistaní "realicen el esfuerzo para dar seguridad y serenidad a la población y, sobre todo, a las minorías religiosas más vulnerables".

"Reitero de nuevo que la violencia y el odio homicida conducen sólo al dolor y a la destrucción. El respeto y la fraternidad son la única vía para alcanzar la paz", agregó.

El portavoz del Vaticano, Federico Lombardi, tras conocer el atentado informó del inmenso dolor del pontífice y señaló que las minorías cristianas han vuelto a ser golpeadas por esta "violencia fanática".

El rezo del Regina Coeli en San Pedro se celebró como el resto de ceremonias de esta Semana Santa bajo fuertes medidas de seguridad y en esta ocasión los fieles fueron controlados por agentes de Policía y Carabineros italianos.