La legislación todavía debe pasar una votación en el Senado neerlandés para que pueda ser aplicada, añadieron.
El Gobierno del primer ministro, el liberal Mark Rutte, se ha propuesto vetar el uso de velos que cubren el rostro como elniqab o el burka -éste también los ojos-, pero también de otras prendas como pasamontañas, con excepciones que permitirían el uso de máscaras en festividades como los Carnavales, o las protecciones que utilizan, por ejemplo, los soldadores.
La prohibición se haría efectiva en centros educativos y sanitarios, en el transporte público y en edificios gubernamentales.
En estos lugares se podrá pedir a la persona que lleve una de esas prendas que se la quite y, si se niega, la Policía podrá imponerle una multa de hasta 410 euros, según el diario "AD".
La propuesta ha recabado reacciones dispares entre los holandeses, que van desde los que la consideran importante desde un punto de vista simbólico, a los que la consideran innecesaria porque el velo integral no es habitual en lugares públicos, si bien su uso se ha incrementado en los últimos años.
En este contexto, la fuerza con más respaldo en Holanda de cara a los comicios del año próximo es el ultraderechista Partido de la Libertad (PVV) de Geert Wilders, que se declara abiertamente antimusulmán.
Francia y Bélgica son países que ya han prohibido el burka pero han ido más allá y han extendido su veto a todos los espacios públicos.